Ley de intertransformación Yin Yang

Ley de intertransformación Yin Yang

La intertransformación del Yin en el Yang y viceversa significa que, en ciertas condiciones, las dos partes opuestas dentro de un fenómeno o cosa se pueden transformar en su contrario, muestra del constante cambio de todo cuanto existe.

El cambio es natural y necesario. Aunque Yin y Yang son opuestos, dependen el uno del otro para existir provocando una "danza" en búsqueda del equilibrio constante, uno creciendo y el otro decreciendo hasta encontrar las condiciones necesarias para su transformación. La madurez de las condiciones para que el cambio se lleve a cabo es vital. El día y la noche son el ejemplo más claro: nunca amanece sin que las condiciones sean las necesarias para que esto suceda.

Del máximo Yin (noche), nace el Yang (día) y del máximo Yang nace el Yin.

Estos cambios ocurren en mayor medida por causas internas, y solo algunas veces por causas externas. Esto quiere decir que el cambio viene de dentro, es natural y alguna vez puede ser provocado desde fuera, provocando que dicho fenómeno o cosa experimente un cambio radical. Si la relación de consumo mutuo en el Yin y el Yang es un cambio cuantitativo, la intertransformación es de carácter cualitativo. Cuando se llega a lo máximo de Yang, naturalmente el Yin nace en lo profundo del Yang, se transforma el día en noche. Cuando se llega a la media noche, en lo profundo de ella nace la semilla del día para que el Yang vuelva a alzarse hasta el cenit.

La cualidad interna de aquello que se transforma es otra condición básica para que lo Yin pueda convertirse en Yang y viceversa. El agua Yin, se puede evaporar y transformar en vapor (Yang) pero no se puede transformar en Tierra o cualquier otro elemento con una cualidad interna distinta a la del agua.

La intertransformación como ley o proceso entre el Yin y el Yang es muy importante. Conocer el estado de las cosas o sus cualidades internas y saberlas en movimiento constante y en búsqueda del equilibrio relativo, nos lleva a pensar que aquello que observamos, naturalmente, buscará la transformación cuando las condiciones, internas o externas, son propicias para el cambio. Este es el principio de la prevención, anticiparse a la transformación. Es decir: en una invasión de viento frío a los pulmones, los síntomas como flujo nasal acuoso, pulso lento y superficial, se transformarán en calor, con flujo amarillo y espeso, pulso rápido y profundo a menos que tratemos a tiempo al paciente.

Los ejercicios agotadores y de alto rendimiento son en extremo Yang, lo cual lleva al agotamiento de las energías internas Yin, mientras al hacer ejercicio el pulso se acelera en extremo (Yang), la cualidad del pulso en reposo será cada vez mas lento (Yin). Una preocupación excesiva (Yang), agota el cuerpo (Yin).

La prevención en Acupuntura se apoya en las leyes del Yin y el Yang, el entenderlas correctamente y buscar el equilibrio en nuestros estilos de vida, nuestras emociones, sabores en la dieta, la actividad sexual, ejercicios... Esto nos acerca no solo a una correcta práctica clínica, también a encontrar en primera persona la unión de los opuestos internos y vivir el Tao como eje principal de la ética médica.


Ver también:

  1. Ley de oposición Yin Yang
  2. Ley de interdependencia Yin Yang
  3. Ley de consumo mutuo Yin Yang

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Página actualizada el 22 de julio de 2021